La aseguradora de riesgos TT Club, junto con BSI CREEN, la Asociación de Logística de Chile (ALOG) y la unidad de investigación de delitos, Signum Services, publicaron un informe donde revelan un dramático aumento de los delitos de robo relacionados al transporte de mercancías en Chile durante el 2022. El documento, titulado «Delincuencia en el transporte de bienes en las cadenas de suministro chilenas», señala que los delitos han aumentado un 27% por encima de los niveles prepandémicos, siendo los productos de electrónica (25%) y alimentos (20%), los más afectados.
El informe se basa en los amplios recursos de datos de las cuatro organizaciones y señala que las medidas inducidas por la pandemia, como la cuarentena, las restricciones de movimientos y los toques de queda, tuvieron el efecto de reducir la incidencia del robo de carga durante gran parte de 2020 y 2021. Sin embargo, el año pasado, con el levantamiento de tales limitaciones, los niveles de delincuencia volvieron a resurgir con fuerza.
«La inflación, el aumento del costo de la vida y el malestar social han motivado a los individuos a recurrir a la delincuencia. Estas circunstancias, que también fomentan un mayor mercado negro, sobre todo de productos alimenticios, infunden una mayor criminalidad en la población», complementó el director general de Prevención de Pérdidas de TT, Mike Yarwood.
¿Cómo actúan las organizaciones delictivas?
El informe constata que las organizaciones delictivas que están detrás de los robos “han explotado a los empleados de las cadenas de suministro”, para obtener datos e información valiosa sobre los flujos y naturaleza de la carga. También estos grupos tienen la capacidad de falsificar las instrucciones de entrega.
Las estadísticas muestran que después del secuestro como modalidad de robo (57%), se encuentra el robo en una instalación o desde el camión cuando la carga está en reposo, contribuyendo al 32% de todos los incidentes.
«El objetivo principal de TT al participar en este informe es el mismo que el de nuestros socios de ALOG y BSI», afirma Yarwood: «crear una mayor conciencia de las amenazas, para que los operadores puedan tomar medidas de protección atenuantes. Con este fin, nuestro informe detalla minuciosamente dos de las principales estrategias utilizadas por los delincuentes: el secuestro y el uso de información privilegiada y la cooperación. El documento también proporciona un estudio de caso bien documentado sobre el papel que desempeñan las organizaciones delictivas en la infiltración de la cadena de suministro en Chile y en toda América Latina».
Consejos para enfrentar la delincuencia
El informe también ofrece una orientación sobre cómo pueden amortiguarse estos riesgos de robo con consejos, en particular sobre cómo combatir el dispositivo delictivo de los despachos ficticios. Asimismo, contiene una larga lista de medidas, desde procedimientos seguros de verificación y comprobación de la identidad del conductor hasta formación del personal para identificar circunstancias sospechosas y supervisión mediante tecnología de seguimiento para garantizar que los envíos se entregan correctamente.
«Con la ayuda de nuestros socios, y utilizando una amplia gama de recursos de datos en profundidad, TT seguirá investigando los delitos contra la carga a escala internacional con el fin de preparar al sector de la cadena de suministro con información sobre las tendencias en este tipo de pérdidas perjudiciales», concluye Yarwood.
Por MundoMaritimo
